Las actuaciones son gratuitas pero requieren reserva de invitaciones a través de la web festivalcastillodeainsa.com 48 horas antes de cada espectáculo

El sábado 4 de julio la cultura de proximidad se adueñará, durante un mes, de la Villa Medieval de Aínsa. La incertidumbre resultante del estado de alarma ha tornado en oportunidad de reinvención para el Festival, capaz de desplegar todos sus encantos ante un público que tampoco reprime, en estos días previos, el deseo de acudir al esperado acontecimiento. Este fin de semana será el punto de partida de un recorrido ambicioso que abarca propuestas para todas las edades y que concluirá el próximo día 26 con un cartel donde prima la presencia aragonesa.

Las propuestas más cercanas del calendario vienen, sin embargo, de lejos. El sábado, el madrileño Carlos Miguel Fernández Soto, pianista, compositor y productor al que encontramos tras el nombre artístico de “Iazabo”, inaugurará la trigésima edición del festival con un espectáculo en el que recupera la figura de El Cid para convertirlo en un héroe contemporáneo. Para ello, se nutrirá del sonido de un órgano litúrgico al que se unirán otros instrumentos como el teclado o la guitarra eléctrica. El producto resultante, “Campeador 2020”, es un conjunto de melodías de influencia medieval con un particular aporte vanguardista. No faltará el toque “de casa” de la mano de la Coral de Sobrarbe, cuyas voces se escucharán en algunos momentos del espectáculo. Iazabo y la Coral actúan en la explanada del Castillo el sábado a las 22:00h, de modo que las invitaciones ya se pueden reservar a través de la web. El aforo es de 400 personas.

El domingo 5 a las 22:00h, en el foso del Castillo, un mosaico de tendencias musicales tratará de emocionar y divertir a niños y mayores. Listón alto el que se pone en cada una de sus interpretaciones el dúo burgalés “Fetén Fetén”, instrumentistas que se crecen con los sonidos más populares y cercanos. Y es que a Jorge Arribas y a Diego Galaz no les falta imaginación y ganas de sorprender, pues además de los instrumentos más convencionales también son capaces de tocar el violín trompeta, el serrucho, la flauta silla de camping o el recogeval. Sin duda, la esencia folk del festival corre a cargo, en esta ocasión, de la pareja castellanoleonesa, para la que será posible reservar una de las 230 entradas a partir de hoy a las 22:00h.

Tras este arranque se retomará la programación el viernes 10 de julio con el monologuista zaragozano Diego Peña, al que le seguirán, el sábado, el espectáculo infantil “PAI Cuentos colorados y más” y el domingo la cantautora colombiana Urpi Barco. Estas dos primeras semanas serán solo un apertivo de todo lo que se mostrará en el esperado acontecimiento que, como dice su director artístico Paco Paricio, de los Titiriteros de Binéfar, “no pretende ser un festival masivo, sino un festival que preserve el punto humano y cercano de la cultura, del país y de sus gentes”.

No obstante, como viene siendo habitual, un nombre conocido del panorama musical se colará en la programación, y en esta ocasión le toca al violinista Ara Malikian el día 18. El músico ya estuvo en la edición de 2014 y no ha querido perder la oportunidad de repetir la experiencia ante un patio de 700 “butacas”.

Medidas Covid-19, protagonistas en 2020

La organización del Festival lleva meses de trabajo a contrarreloj para adaptarse a las nuevas circunstancias. Espacios abiertos, limitación de aforos, reserva de entradas, separación entre espectáculos, distribución de los mismos en cuatro fines de semana para evitar aglomeraciones y obligatoriedad de entrar a los recintos con mascarilla, son algunas de las medidas establecidas para garantizar la seguridad de todos los asistentes.

El trigésimo cumpleaños del festival demuestra que, a pesar de las dificultades, la reinvención es posible si prevalece el entusiasmo. Desde luego, era impensable un comienzo de verano sin las gentes del espectáculo dando vida y color a los muros del Castillo. La pandemia, además, ha abierto la veda de la larga duración, pues un festival de cuatro fines de semana nunca se habría contemplado de no ser por el contexto que estamos viviendo. En ese sentido, los organizadores quieren que la edición de 2020 siente precedentes.

La ejecución del Festival Castillo de Aínsa cuenta con apoyos diversos: el patrocinio de la Diputación Provincial de Huesca, la dirección artística y la producción de la Casa de los Títeres de Abizanda y de ZZ Producciones, la organización del Ayuntamiento y la colaboración de Espiello y de la Comarca de Sobrarbe.

Ir al contenido